Joaquin Sabina – Blues de la escalera

 

 

 

Joaquin Sabina – Blues de la escalera

El más capullo de mi clase (¡que elemento!)
Llegó hasta el parlamento
Y, a sus cuarenta y tantos años
Un escaño
Decora con su terno
Azul de diputado del gobierno
Da fe de que ha triunfado
Su tripa, que ha engordado
Desde el día
Que un ujier le llamó su señoría
Y cambió a su mujer por una arpía
De pechos operados
Y sin dejar de ser el mismo bruto
Aquel que no sabía
Ni dibujar la o con un canuto
El superclase de mi clase (¡que pardillo!)
Se pudre en el banquillo
Y, a sus cuarenta y cinco abriles
Matarile
Y a la cola del paro
Por no haber pasado por el aro
Vencido, calvo y tieso
Se quedó en los huesos
Aquel día
Que pilló a su mujer en plena orgía
Con el miembro del miembro (¡que ironía!)
Más tonto del congreso
Y sin dejar de ser el mismo sabio
Que, para hacer poesía
Sólo tenía que mover lo labios
Y yo que no soy más
Listo ni tonto que cualquiera
A mis cuarenta y pocos
Tacos
Ya ves tú
Igual
Sigo de flaco
Igual de calavera
Igual que antes de loco
Por cantar
Por cantar el blues
De lo que pasa en mi escalera
La más maciza de mi clase (¡que cintura!)
Cotiza la hermosura
Y, a sus cuarenta y pico otoños
Hasta el moño
Del genio del marido
Huyó con otro menos aburrido
Tanto ha prosperado que un jaguar ha estrenado
El mismo día
En que la divorció de la utopía
Un talón con seis ceros que le había
Firmado un diputado
Y sin dejar de ser la seductora
Bruja que escondía
Bajo la falda una calculadora
Y yo pobre mortal
Que no he gozado sus caderas
A mis cuarenta y pocos
Tacos
Ya ves tú
Igual
Sigo de flaco
Igual de calavera
Igual que antes de loco
Por cantar
Por cantar el blues
De lo que pasa en mi escalera
Por lo demás ni más
Ni menos larga que cualquiera
A mis cuarenta y pocos
Tacos
Ya ves tú
Igual
Sigo de flaco
Igual de calavera
Igual que antes de loco
Por cantar
Por cantar el blues
De lo que pasa en mi escalera
Por cantar el twist
De las verdades verdaderas
Por cantar el bolero que canta mi portera
Por cantar una rumba gitana y canastera
Por cantar aquel tango el día que me quieras
Por cantar loco por incordiar a los horteras
Por bailar bajo la lluvia sobre las aceras
Por cantar vallenatos que amansen a las fieras
Por cantar hasta que salga el sol por antequera
Por cantar con mi primo rosendo a su manera
De vivir siempre con gente, siempre solateras
Por cantar el rock and roll de las gasolineras
Por cantar un merengue pegado a una palmera
Por cantar camino de la habana una habanera
Por cantar un mambo con smoking y chistera
Por tocar. esa guitarra carabanchelera
Por cantar hoy en pekín, mañana en talavera
Por cantar el bugui-bugui de las carreteras
Por cantar allá en el rancho grande una ranchera
Por cantar como si el almanaque no existiera
Por seguir dando el cante hasta el día que me muera
Por cantar un calipso contra la ley corcuera
Por cantar si pones otra ronda, tabernera
Por cantar en la calle, en el curro, en la bañera
Por cantar menos un bakalao lo que quieras
Por silbar al paso de una guapa peluquera
Etcétera

 

La primera máquina de karaoke la introdujo el cantante Daisuke Inoue, pero el éxito fue un poco por casualidad, ya que la gente asistente a sus conciertos insistía en poder cantar junto a él, gracias al experimento interactivo tan novedoso. Cuando el cantante vió el gran potencial del invento, lo patentó en un primer modelo consistente en una máquina a la que había que echar una moneda para que funcionase

 

karaokes.com.ar

 

En América y Europa se hicieron bastante conocidos este tipo de actividades, sobre todo en los bares, cuyo público era mayormente joven. Principalmente, el corazón del canto al vacío son las máquinas de karaoke, las que constan de una pantalla, mecanismo de supresión de voz, lector de DVD’s, además del sistema de sonido. Al principio, las máquinas tenían un lector de cintas, pero luego se cambió a las clásicas cintas de DVD’s. Se han llegado a abrir lugares especiales en los que sólo se puede hacer karaoke, además de comer y beber. Sin embargo, hay otros lugares que no están dedicados completamente a prestar el servicio del karaoke, pero establecen algunos días de la semana para ofrecerlo. Hoy en día, las máquinas son mucho más modernas, con pantallas de alta definición y de gran tamaño, al igual que un sonido potente. De igual forma, existen concursos a nivel mundial de esto e, incluso, han llegado a ser televisados.